Migrar a la Nube: Y si nos deshacemos de nuestros servers completamente?

En mis artículos anteriores cubrimos la visión general, lo que debes hacer primero y cuál debe ser tu objetivo final. Pero hay un último enfoque a cubrir: ¿Qué pasa si no te ocupas de nada en absoluto? Esto es lo que se llama Software como Servicio (SaaS). Ya no pagas por servidores ni licencias, pagas solo mensualmente por use de un servicio.

En mi opinión, los ejemplos más claros de este enfoque son:

• Gmail y Workspace de Google
• Office365 de Microsoft (el viejo Office que también se ha trasladado a la nube)
• Slack, que parece ser el líder en comunicación por mensajería instantánea
• Salesforce, el líder en CRM en la nube
• HubSpot, una sólida solución para el servicio de atención al cliente
• Mailchimp, que tiene una presencia muy fuerte en el marketing por correo electrónico
• Shopify, que puede alojar tu comercio electrónico

Y esta es solo una lista muy breve de las ofertas que tienes disponibles, hay muchas más y la lista crece continuamente.

Entonces, la pregunta es: ¿por qué molestarse en alojar tu propia infraestructura cuando puedes usarla como un servicio? Aquí hay algunas preguntas que puedes hacerte para decidir:

1. ¿Cuántos usuarios tienes? Esta es una pregunta importante, ya que la mayoría de los servicios cobran por usuario. Por lo tanto, si no tienes una gran base de usuarios, es probable que sea menos costoso consumir servicios.
2. ¿Tienes conocimientos y habilidades de DevOps dentro de tu empresa? Si realmente no necesitas tener este conocimiento o capacidad dentro de tu empresa, es probable que te sea más rentable consumir servicios.
3. ¿Cuánto control necesitas sobre tus herramientas y datos? Cuando utilizas un SaaS, tienes un acuerdo que protegerá tus datos, pero en algunas situaciones no hay una manera fácil de migrar de un servicio a otro.
4. ¿Puedes utilizar soluciones listas para usar o necesitas algún tipo de personalización? La mayoría de las soluciones SaaS tendrán una capacidad limitada o nula para las personalizaciones.

A menos que tengas una necesidad específica y/o tengas muchos usuarios, las soluciones SaaS probablemente serán tu mejor opción. Mantendrán tus costos dentro de un presupuesto, resolverán muchos problemas por ti y te permitirán crecer sin problemas. En el peor de los casos, puedes migrar de un SaaS a una solución alojada a medida que tus necesidades cambien.

Así que, aunque sea el último enfoque de la nube que cubro, podría ser tu primera y mejor opción. Si bien está opción implica ceder control y depender de un proveedor, te libera de lidiar con la infraestructura y es altamente probable que reduzcas tus costos.

Cuando comencé a escribir escribir estos artículos la progresión natural era terminar con esté artículo, pero me di cuenta de dos cosas que me faltan y que creo que vale la pena mencionar cuando se piensa en las soluciones de nube actuales: Kubernetes y Terraform. Tengo pensado escribir dos artículos más discutiendo sus posibilidades.